COMENTARIO DE TEXTO
Introducción
Estamos
ante un fragmento de La familia de
Pascual Duarte de Camilo José Cela. Una obra que inaugura la corriente
denominada “tremendismo”. En ella se relatan las historias de Pascual Duarte,
un prisionero que espera a morir.
1.Características literarias y lingüísticas
Se trata de una narración en primera persona, por el protagonista, Pascual Duarte.
Utiliza un lenguaje popular con un léxico acorde, así observamos expresiones tales como “alargarme los dientes” y palabras como “asuntillos”, propias del pueblo y en consonancia con la clase social de los personajes. Aunque, también utiliza estructuras sintácticas complejas que no coinciden con el nivel de habla del protagonista.
Escrita en estilo directo, lo que hace la lengua más oral, junto con el uso d exclamaciones, que además hacen al lector aproximarse más a la historia.
En cuanto a los personajes, aparecen en el texto el protagonista ya mencionado, y aparece un personaje intranscendente en la historia, un personaje secundario, el sargento Adrián Nogueira, que convive en su mismo hogar.
2. Tipo
de texto
El
fragmento se corresponde con un texto narrativo.
3. Resumen
El
protagonista (Pascual Duarte) intenta viajar a América, pero tras informarse en
una agencia inútilmente, y hablar con un sargento alojado con él que el traduce
los papeles de la agencia, descubre que no tiene dinero suficiente para poder
partir.
OPINIÓN SOBRE LA INMIGRACIÓN EN LA ACTUALIDAD
Existe
el concepto de inmigración porque existe el de fronteras. Las fronteras surgen
como consecuencia de un fracaso social y económico, en el sentido de que el
país no es capaz de integrar a los inmigrantes, tanto económicamente como
socialmente.
Vivimos
en un mundo donde la palabra compartir no todos la conocen. Una frontera no es
un muro físico, una línea que se ha pintado con un pincel gigante o que un
cualquiera no te deja entrar porque no le gustas, es un muro económico. Surgen porque
un país recibe más personas de las que puede soportar, un país rico. Si el
inmigrante que llega trabaja y cotiza para el país, para este no es un
problema, pero si el país no tiene puestos de trabajos para los inmigrantes que
recibe estos pasan a ser una carga pues debe ofrecerle sanidad, educación. En
Inglaterra, por ejemplo, los extranjeros comunitarios que llegan reciben las
mismas ayudas económicas que los ingleses, y estas ayudan son pagadas por
todos, de forma que cuantos más inmigrantes vengan más dinero deberán pagar en
impuestos y más tendrán que repartir. ¿Qué ocurre entonces? Que los países
desarrollados y con recursos no quieren invertir en personas si les va a salir
caro a ellos, llega un punto en el que la economía del país no puede soportar
la llegada de tantos inmigrantes, de forma que el país cierra las puertas y
aparecen las fronteras.
Pasó
con Alemania, en un principio Merkel dejo entrar a los refugiados sirios, pues
eran gente que podía cotizar, pero llegó un momento en que no tenía puestos de
trabajo para los tantos refugiados que querían entran.
El
problema está en el que los países no son conscientes, o más bien no quieren
ser conscientes, de que la solución no está en cerrar las fronteras, pues no
está en el país de destino, sino que está en el país de origen. La solución no es construir un centro de
internamiento o un espacio para que “quepan” aquí (que es lo que se está
haciendo actualmente), sino en resolver la situación allí. Me refiero, si el
motivo de la inmigración es económico, generalmente lo es, y vienen de un país
pobre y sin recursos, la solución está en que los países que pueden inviertan
en el desarrollo del mismo, en enseñarles a autoabastecerse y a salir adelante,
y compartir lo que tenemos.
Claro,
que es todo muy complejo, y esta complejidad se reduce a problemas de dinero.
Existe un fondo, organizado por la ONU, que esta destinado al desarrollo de los
países pobres, pero el dinero que llega a estos, al final acaba en manos de
especuladores, intermediarios o dictadores, y no es de gran ayuda.
La
clave estaría, en mi opinión, no en mandar solo recursos, sino en mandar
personas. En que los ciudadanos del país rico que han construido su país y
están en un nivel de vida bueno, fueran capaces de ir al país pobre y compartir
el trabajo y desarrollar juntos lo que ya esta desarrollado en el país rico.
Conozco
a una ingeniera química que ha ido a un sitio de Honduras (el cual no recuerdo)
a construir una potabilizadora de agua, ella ha ido voluntariamente y le han
dado el dinero y los recursos para hacerlo a través de una ONG. Lo que vengo a
explicar con esto es, manda a la persona que construya la potabilizadora y
ofrécele medios. Si se hiciera esto a niveles grandes y desde los países ricos,
es decir, invertir en el nivel de vida de los países no ricos, ellos no
tendrían la necesidad de emigrar. Invierte en su educación, enséñales a
“autoayudarse”. No los eches del país porque no hay hueco en un colegio,
construye un colegio en su país donde haya calidad y comparte la educación.
Concluyendo,
no existiría el concepto de pobre si no existiera el concepto de rico. Y si no
existieran estos conceptos, no habría fronteras, y por tanto no habría
inmigración. Las fronteras son un parche, una tirita, no la cura.
No
deberían existir, el mundo debería ser como una biblioteca gigante donde los
libros están al alcance de todos. Un lugar donde las culturas fueran
respetadas, donde todos tuviéramos los mismos recursos económicos y las mismas
posibilidades de desarrollarnos. En fin, quizás sea un poco utópico, soñar es gratis.
Magnífico, ¡qué nos importa que sea una utopía!
ResponderEliminarMuy bien.